lunes, 12 de noviembre de 2012

Adiós a Manuelito ¿Acaso por negligencia médica?



Apenas se desvanece la vida -material- de Manuel Vázquez Luna, miembro y portavoz de la organización pacifista de Las Abejas, sus compañeros reafirman la propagación de una autonomía cada vez más sólida y, para furia de unos cuantos, visible.
“Manuelito” -como se le conoce en la intimidad de la resistencia indígena- tenía un tumor cerebral que le fue detectado en 2009, lo que lo mantuvo bajo quimioterapias y radioterapias en el Instituto Nacional de Neurología y Neuropsiquiatria (INNN) de la Ciudad de México.


Pero el 22 de octubre pasado tuvo que ingresar al Hospital de Las Culturas, en San Cristóbal de las Casas, Chiapas. Bastaron poco más de dos semanas para que Manuelito falleciera (10 de noviembre de 2012).
En su informe, Las Abejas denuncian negligencia al interior de este nosocomio, un complejo del que bien habló el saliente (incluso, al parecer, del país) Felipe Calderón, hace dos años, cuando lo inauguró.
El Hospital beneficiaría “a más de 600 mil” habitantes de unos 20 municipios que conforman Los Altos de Chiapas; sin embargo, tal parece que las cifras fallaron con una de estas personas, en la humanidad de Manuelito.
“Estamos indignados, aunque quizá la enfermedad de Manuelito ya no tenía alternativa, pero eso no quería decir que se le tratara con discriminación, ni que fuera víctima de negligencia médica como lo sufren muchos otros y otras pacientes en el mencionado hospital (…) El problema es que el sistema de salud mexicano es ineficiente y no está pensado para una salud digna”, refieren Las Abejas.
Entre otras denuncias, Las Abejas refieren que en dicho hospital les obligan a pagar el Seguro Popular, “pero como organización no estamos de acuerdo con este programa ya que es nuestro derecho decidir o no aceptar y esa decisión de nuestra organización nos la tienen que respetar. El programa de Seguro Popular no lo rechazamos por ignorancia, sino, porque es una imposición y política de privatización de la salud (sic)”.
Entonces -preguntan-  ¿Por qué le pusieron “Hospital de Las Culturas, si no respeta nuestra cultura de pueblo originario? ¿O de cuál “cultura” hablan? Esta actitud del personal del hospital es una falta de respeto a la dignidad humana.
Como en el caso de cientos de miles por todo el país, Manuelito fue un paciente más en un hospital más. Él, que sobrevivió incluso a la masacre perpetrada hace casi 15 años en Acteal; él, que ya no encontró con vida a sus padres después de aquel 22 de diciembre de 1997; él, que no pudo contar la tragedia a sus hermanos, muertos también en la escena; él, no logró ya resistir la vergüenza de tan alevoso sistema de salud.
Sin embargo, ahora se conserva como el guardián de la memoria y el caminar indígenas, en aquellos rumbos de Los Altos de Chiapas.
“Hermano y compañero Manuelito, así como empezamos escribiendo este documento que el sistema de salud aquí en nuestro México no nos ayuda a nosotros los pueblos originarios, tú mismo fuiste testigo en uno de los hospitales de cómo es su atención y servicios. Manuelito cuéntale todo eso a nuestro Papá-Mamá Dios y pide por nosotros y nosotras tus hermanos que sigamos firmes en la construcción de la paz con justicia y dignidad; que nunca nos dé miedo denunciar las injusticias y crímenes de los malos gobiernos”.

No hay comentarios: